24/04/2010
Las obras de la calle General Páramo que han subsanado los problemas de accesibilidad a las viviendas y han suprimido las barreras arquitectónicas con el fin de corregir las deficiencias existentes y garantizar la seguridad de los peatones ya han terminado.
Las obras han constado con un presupuesto de 100.561 euros y han sido subvencionadas en un 75 por ciento por la Comunidad Autónoma y el resto han sido aportación municipal.
Las hormas de esta vía, según la edil de Planificación, María José Bedia, estas obras han consistido básicamente en una acera elevada más de un metro de la rasante de la calle, ya que “cuando se construyeron, incluyeron unas rampas con excesiva pendiente, prácticamente inaccesibles, esto unido al deterioro que existe en ellas, ha hecho necesaria su reconstrucción, así como variar la disposición de los escalones de acceso, para aumentar la seguridad de los peatones”.
La empresa adjudicataria de las obras, Peñalver Ruiz, ha procedido a la demolición del pavimento y colocación de pavimento antideslizante, la reconstrucción de las hormas con una nueva disposición de las escaleras y del aparcamiento existente a través de la variación de los escalones de acceso que se realizarán de forma paralela al vial, para aumentar la seguridad de los peatones.
Además, según ha recordado la edil se ha sustitutito toda la red de agua potable de las viviendas adyacentes, ya se están construyendo las rampas de acceso y se desmontará la barandilla actual y se cambiará por otra con barras verticales más segura para los niños.
La edil ha manifestado su satisfacción por ver cómo se da, una vez más, cumplimiento a las demandas de los vecinos, puesto que fueron los propietarios de las viviendas los que solicitaron esta remodelación de las hormas al existir peligro para acceder a las casas. Por ello, la Concejalía de Planificación elevó al Pleno de la Corporación una moción en la que solicitó la subvención a la Comunidad Autónoma, la cual fue concedida.
Bedia ha indicado que, estas obras, junto con todas las que se han realizado en las calles Padre Bernardino, La Estrella, El Castillo, Tinajerías, entre otras, están mejorando la accesibilidad de los peatones dentro del casco urbano. Otra de las acciones que se han llevado a cabo para suprimir las barreras arquitectónicas es la construcción y mejora de la accesibilidad en la Plaza de la Balsa Vieja, que será inaugurada en breve.
Fuente: Totana.es