Ayuntamiento de Totana

EL GRUPO POPULAR PROPONE QUE SE DEDIQUE UNA CALLE EN MEMORIA DE SOR VIRGINIA JOSEFA PÉREZ NIEVA MASCARÚA

(04/02/2002)

El Grupo Municipal Popular ha elevado una Propuesta al Pleno del Ayuntamiento para que se dedique una calle Sor Josefa, religiosa totanera que fue directora del Hospital Asilo y Colegio de la Milagrosa. Según el portavoz popular, Juan José Salas "a pesar de los años transcurridos sigue vivo entre los totaneros el recuerdo de esta religiosa que supo ganarse el cariño y la estima de quienes la conocieron, siendo numerosos los vecinos que se han dirigido a nuestro Grupo Municipal solicitando que traslademos al Pleno su deseo de que Totana homenajee a esta religiosa dedicando una calle del casco urbano a su recuerdo."

El Grupo Municipal Popular ha elevado una Propuesta al Pleno del Ayuntamiento para que se dedique una calle Sor Josefa, religiosa totanera que fue directora del Hospital Asilo y Colegio de la Milagrosa. Según el portavoz popular, Juan José Salas "a pesar de los años transcurridos sigue vivo entre los totaneros el recuerdo de esta religiosa que supo ganarse el cariño y la estima de quienes la conocieron, siendo numerosos los vecinos que se han dirigido a nuestro Grupo Municipal solicitando que traslademos al Pleno su deseo de que Totana homenajee a esta religiosa dedicando una calle del casco urbano a su recuerdo." La figura de Sor Josefa está íntimamente ligada a la historia de nuestro pueblo, concretamente a los años finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX, durante su estancia en Totana, esta religiosa se ganó el cariño y la admiración de sus contemporáneos. Sor Virginia Josefa Pérez Nieva Mascarua nació en Puebla (México) y llegó a Totana en 1889, encargándose de la dirección del Hospital Asilo y Colegio de la Milagrosa así como de la enseñanza de párvulos. Según el testimonio del cronista oficial de la Ciudad, D. Mateo García, así como de vecinos de Totana que la conocieron o han tenido referencias directas de ella, Sor Josefa se distinguió por su sencillez y su bondad. Según estas fuentes enseguida cobraron fama de milagrosas sus curas, pues Sor Josefa tenía a su cargo la asistencia de enfermos y cuidado de la Capilla. Desde este puesto Sor Josefa cuidó con mimo a enfermos y heridos, consagrando su vida entera a hacer bien a los pobres con espíritu de sencillez, humildad y constancia admirables. Así Sor Josefa se granjeó el cariño y la devoción de Totana, adquiriendo entre nuestro vecinos fama de benefactora. El día 21 de febrero de 1939 fallecía Sor Josefa, y una inmensa muchedumbre acompañó su féretro hasta el Cementerio del Carmen, donde recibió cristiana sepultura. Gabinete de Prensa del Partido Popular de Totana