Ayuntamiento de Totana

(20/09/2002)

El concejal de Servicios Comunitarios, Juan José Cánovas, informó hoy de que a partir del próximo lunes y por tiempo indefinido, se procederá a cortar totalmente el suministro de agua en la parte baja del casco urbano entre las 0 y las 6 horas. Esta medida sólo se llevará a cabo de lunes a jueves.

La delicada situación derivada de la escasez de agua, motivó que hace unos meses la Mancomunidad de los Canales del Taibilla pidiera a los ayuntamientos que adoptaran medidas para reducir el consumo. El Ayuntamiento de Totana, en virtud del compromiso adquirido, optó por proceder al cierre de válvulas en las redes del casco urbano y realizar cierres parciales de válvulas en algunos otros puntos, con el fin de reducir la presión. La medida, según el responsable de Servicios Comunitarios, no ha dado los resultados esperados, ya que se ha comprobado como, de forma global, durante los meses de julio y agosto se ha registrado un aumento del 3%. Este hecho no está permitiendo conseguir los objetivos marcados, a pesar de que en varias zonas del término municipal sí se ha reducido el consumo, concretamente en La Ñorica (14'3%), El Paretón (12'4%), Lébor (7'6), Virgen de Las Huertas (6'8% y Raiguero (2'6). Cánovas recordó que la Mancomunidad de los Canales del Taibilla fijaba la reducción en más de un 10%, lo que ha obligado a la concejalía de Servicios Comunitarios a extremar las medidas. Por ello, a partir del próximo lunes y por tiempo indefinido, se procederá a cortar totalmente el suministro de agua en la parte baja del casco urbano entre las 0 y las 6 horas. Esta medida sólo se llevará a cabo de lunes a jueves. También se han dado órdenes tajantes para reducir el consumo en las instalaciones municipales, y paralelamente, se realizarán actuaciones en las redes para detectar y arreglar fugas. El concejal de Servicios Comunitarios hizo un nuevo llamamiento a la población para que se conciencie de la gravedad de la situación, porque en caso contrario la Mancomunidad de los Canales del Taibilla procedería a corte del depósito y ello supondría muchas más molestias para los vecinos, fundamentalmente a los de las zonas altas. "Debemos hacer un esfuerzo para que en el casco urbano se consiga reducir el consumo".