Ayuntamiento de Totana

IZQUIERDA UNIDA EN TOTANA DENUNCIA LA INSTALACIÓN DE CONTENEDORES DE BASURA EN LOS BARRIOS SIN CONTAR CON LOS VECINOS AFECTADOS.

(09/01/2008)

Los concejales de la Coalición afirman que los contenedores serán focos de insalubridad y conllevará despidos en el personal de recogida. La concesión de la contrata a la empresa actual, fue impuesta

Los Concejales de IU + Los Verdes en Totana, han denunciado la instalación indiscriminada de contenedores de basura orgánica en distintos barrios de Totana, ante la indignación de vecinos y vecinas, que ven como se deteriora la imagen urbana en un municipio que no ha utilizado nunca este sistema. La Coalición eco socialista afirma que son varios los vecinos que se han dirigido a los concejales para protestar por esta medida que va en detrimento de la calidad de vida y la imagen urbana de Totana. En la práctica, los contenedores son focos permanentes de malos olores y lixiviados, que afean y afectan la salud de los vecinos, cuando se sabe que la periodicidad en el lavado de los mismos deja mucho que desear. “Totana era modélica en el cumplimiento de las ordenanzas, sacando las basuras en las horas estipuladas y recogida nocturna, sin existir los molestos e insalubres contendores en las calles, durante todo el día y ahora, vienen a ubicar verdaderos focos de insalubridad junto a las viviendas…”, ha manifestado el concejal de la Coalición, Juan José Cánovas. A las molestias y pérdida de calidad en el servicio, se añade la reducción de personal de recogida prevista, porque los contendores instalados no necesitan de peones, siendo solo el conductor suficiente para proceder al vaciado de los contenedores en el camión. “Esta reducción de personal y pérdida de calidad en el servicio, lejos de traducirse en una reducción en el recibo al vecino, supone un incremento en las tasas, que ya han sido aprobadas en solitario por el Gobierno Municipal del PP…”, aseveran desde el Grupo Municipal de IU + Los Verdes en el Consistorio totanero. Se deteriora el servicio de recogida y se aumentan los impuestos, en una contrata cuya adjudicación estuvo llena de lagunas técnicas y puntos oscuros, como un Convenio Urbanístico en la Pedanía del Raiguero, junto al de Nuaria.